Es tiempo de pensar hacia dónde queremos llevar nuestra Universidad. Los hechos sucedidos en las sedes de las Facultades muestran el grado de insatisfacción de los estudiantes y docentes, aunado a los problemas de infraestructura, evidencian la gran necesidad de cambios que requiere la institución y también en su comunidad.
Independiente de esta realidad, no podemos continuar expresando nuestra inconformidad dañando, vandalizando o destruyendo las instalaciones de nuestra Universidad o permitiendo que otros lo hagan, sin pensar que todos los elementos que hacen parte de las sedes provienen de los recursos públicos a los que contribuyen nuestros conciudadanos con mucho esfuerzo y sacrificio mediante el pago de los impuestos. La destrucción de las sedes, el robo y la vandalización de baños y enseres, afectan a toda la comunidad universitaria, comenzando por nuestros estudiantes.
Si no puede visualizar la información, lo invitamos a consultar a continuación el boletín Foro Al Día No. 20