Me quedan los mejores recuerdos de mi práctica docente en el Liceo Femenino "Mercedes Nariño"

Invitada: Nicoll Ruíz.  Estudiante de 10º. Semestre Licenciatura en Química. Facultad de Ciencias y Educación.

Recientemente finalicé la práctica docente en el Colegio Liceo Femenino Mercedes Nariño, una institución pública con 104 años de tradición, destacada por sus semilleros y estudiantes críticas, reflexivas y autónomas, ubicada en la localidad de Rafael Uribe Uribe. 

Inicie mi práctica profesional al tiempo que se vivía el paro nacional en las calles y además las medidas de confinamiento por el COVID 19. Asumí las clases virtuales para los grados 11º con bioquímica y 9º con química. Fue difícil no verlas y que por las condiciones, no participarán, pero la motivación llegó con el uso de juegos, simuladores y tableros compartidos.

Con el grado 11, el objetivo fue que relacionaran el conocimiento disciplinar con el conocimiento cotidiano. Hablamos de nutrición y su importancia a través de las macromoléculas y “las hormonas las glándulas" dónde abordamos entre otros temas,  las emociones, sustancias psicoactivas y enfermedades por desequilibrio hormonal, fue emocionante por qué no espere enseñar bioquímica en el colegio.

Se inicia el semestre 2021-3 con el desarrollo de seminarios en la Universidad Distrital, en el que intercambiamos nuestras experiencias como docentes en formación con los docentes titulares de los programas, allí tuvimos la oportunidad de plantear estrategias de enseñanza y aprendizaje actuales.

Este segundo semestre de la práctica tuve sextos y séptimos, abordamos la muerte celular y sus implicaciones en enfermedades neurodegenerativas, el uso del microscopio y el modelo atómico de Dalton con pimpones de colores.

Otro de mis cursos fue el de la Filarmónica, en el que cada estudiante interpreta un instrumento o canta, son cariñosas, talentosas y curiosas, con un gran sentido de solidaridad y compañerismo, que se evidenció con una estudiante con discapacidad motora. El amor con el que la trataban y destacaban sus capacidades, me recordaron lo especial y gratificante que es ser docente, el aula termina siendo un laboratorio donde los procesos de aprendizaje y enseñanza evolucionan. Los docentes debemos prepararnos permanentemente, para responder a mentes tan extraordinarias sus preguntas en sus contextos.

Estoy muy agradecida con el Liceo Femenino Mercedes Nariño, estudiantes, mis docentes y compañeros, quienes hicieron posible que mi práctica profesional haya sido tan enriquecedora y tener el privilegio de llevar la química a las aulas de esta importante institución. Me siento orgullosa de haber representado a mi Alma Mater, mi Universidad Distrital. Invito a mis colegas, hoy docentes en formación, a apropiarnos de nuestra labor, porque en nosotros se fundamenta el futuro de la construcción de nuevos ciudadanos.

Gracias a FORO ABIERTO CSU por invitarme a compartir mi experiencia.